La sincuya es una fruta que tal vez no conocías, pero en las zonas rurales de El Salvador y en otros países con clima tropical, es bastante común.

Aunque su nombre científico es Annona purpurea, aquí en Centro de América, la conocemos simplemente como fruta de sincuya (chincuya mexicana) o anona espinosa.

Su apariencia es algo rara, al igual que la sunza pero sin espinas: verde, redondeada, con una cáscara rugosa y espinosa. Por dentro, encontrás una pulpa suave, de color amarillo, con un sabor que va entre lo dulce y lo ácido, ideal para alimento de algunas especies de ave.

Cultivo sencillo

Si vives en una zona del campo, es probable que te hayas encontrado con un árbol de sincuya. Fijate que esta fruta crece en climas cálidos y no requiere de muchos cuidados. Basta que solo tengas suficiente sol y un poco de espacio. En los terrenos de las casas campesinas, la sincuya se planta sin complicaciones, y da frutos con regularidad, lo cual es perfecto para quienes sacar algún tipo de producción.

¿Cómo se consume la sincuya?

Obviamente, no hay mucha ciencia para comerla. Normalmente, agarrás una sincuya madura, la cortás a la mitad y le sacás la pulpa con una cuchara ya sea de madera o de metal. Eso sí, tiene bastantes semillas, así que vas a tener que quitarlas mientras comés. Quiero que sepas que su sabor se encuentra entre lo dulce y lo ácido, así que cae bien en cualquier momento del día, especialmente cuando hace calor.

Beneficios de la sincuya

La sincuya no solo es rica en su sabor, sino que también tiene algunas propiedades interesantes:

  • Rica en vitamina C: Ayuda a fortalecer el sistema inmunológico. En el campo, muchas veces se usa para hacer té cuando andás resfriado o con gripe.
  • Buena para la digestión: Gracias a su contenido de fibra, puede ayudarte a mantener una buena digestión, o si padeces de estriñimiento ya tienes un alivio.
  • Refrescante: Como es jugosa, es buena opción para comértela los días de calor. Tambien te puede quitar la sed de una manera muy natural, por esta causa también la conocemos muchos de nosotros.

Otros usos en gastronomía

En muchas partes, la sincuya también se usa para hacer bebidas refrescantes. Algunos la licúan con un poco de agua y azúcar, y queda un jugo fresco. También se puede usar en postres como jaleas o mermeladas, aunque esto aquí en La Libertad, es menos común. Si vivís en el campo, sabés que se aprovecha todo lo que se puede, y la sincuya no es la excepción.

Algo curioso es que la fruta chincuya no solo es alimento para nosotros, sino que también es para varios animales del campo. Los famosos tacuazines (zarigüeyas) se alimentan de esta fruta cuando está madura, y los pájaros suelen picotear la pulpa, aprovechando su sabor. Incluso otros animales pequeños del monte también se ven atraídos por el aroma dulce que desprende la sincuya cuando está lista para caer del árbol.

¿Cómo se cultiva la sincuya?

La planta de sincuya es un árbol de tamaño mediano. No necesita cuidados especiales, lo cual es una buena noticia, especialmente si eres un poco perezoso para sembrar. Eso sí, le gusta el sol y no se lleva bien con el exceso de agua, así que si vivís en una zona donde llueve demasiado, no es tanto alentador lo que te estoy informando, por lo que es bueno buscar un terreno con buen drenaje.

Cosecha en el campo

En las zonas rurales de El Salvador, aquí en el lugar donde vivo, muchos campesinos cultivan sincuya para consumo propio. Es importante aclararte, que e no es una fruta que se vea mucho en los mercados, pero aquí en lo rural es parte de la alimentación de muchos animales y de campesinos. La ventaja es que no requiere de pesticidas ni fertilizantes como otras frutas, lo que la hace una opción más natural.

Conclusión

La sincuya es una fruta rara y refrescante, perfecta para quienes viven en el campo y buscan algo sencillo de cultivar y lleno de beneficios. Aunque no sea tan conocida como otras frutas tropicales, su sabor y sus propiedades la hacen un poco más conocida. Es una opción sencilla, nutritiva y, sobre todo, fácil de ver y consumirla en ciertas zonas rurales de El Salvador, como lo es aquí en la Libertad y occidente.

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